• Por el camino blanco marchan contritos
    los monjes centenarios de la abadía,
    meditando breviarios... Al irse el día,
    por el camino blanco marchan contritos
    en larga caravana, trágica y pía.

    Barbas pontificales, barbas de plata,
    idealizan sus férvidos rostros sagrados,
    y, empuñando los mangos de sus cayados
    que a la luz del crepúsculo florecen...

  • La voz de bronce no hay quien la estrangule:
    mi voz de bronce no hay quien la corrompa.
    No puede ser ni que el silencio anule
    su soplo ejecutivo de pasión y de trompa.

    Con esta voz templada al fuego vivo,
    amasada en un bronce de pesares,
    salgo a la puerta eterna del olivo,
    y dejo dicho entre los olivares...

    El río Manzanares,
    un traje...

  •  Ayer en la taberna, tristemente,
    un borracho, pontífice del vino,
    decía a otro borracho impenitente,
    bebiendo el primer vaso matutino:

     Yo llevo en mi interior un silencioso
    Genio o Poder que nunca me abandona:
    Enemigo ignorado y fastidioso
    que...

  • No merecías las loas vulgares
    que te han escrito los peninsulares.

    Acreedora de prosas cual doblones
    y del patricio verso de Lugones.

    En el morado foro episcopal
    eres el Árbol del bien y del mal.

    Piensan las señoritas al mirarte:
    con virtud no se va a ninguna parte.

    Monseñor, encargado de la Mitra,
    apostató con la Danza de Anitra.

    ...
  • Señor, Dios mío: no vayas
    a querer desfigurar
    mi pobre cuerpo, pasajero
    más que la espuma del mar.

    Ni me des enfermedad larga
    en mi carne, que fue la carga
    de la nave de los hechizos,
    del dolor el aposento
    y la genuflexión verídica
    de tu trágico pavimento.

    No me hieras ningún costado,
    no me castigues a mi cuerpo
    por...

  • HA VIVIDO MI ALMA...

    Ha vivido mi alma en las Edades viejas
    en un guerrero heroico y un galán trovador,
    y en gentiles mancebos de enroscadas guedejas
    enamorada siempre de una prohibición.

    Mi alma fue de Tartufo, de un ídolo pagano,
    de un impúber de lesbia, de un...

  •  Has vuelto, organillo. En la acera
    hay risas. Has vuelto llorón y cansado
    como antes.
     El ciego te espera
    las más de las noches sentado
    a la puerta. Calla y escucha. Borrosas
    memorias de cosas lejanas
    evoca en silencio, de cosas
    de cuando...

  • Vivir de lo pasado por desprecio al presente,
    mirar hacia el futuro con un hondo terror,
    sentirse envenenado, sentirse indiferente,
    ante el mal de la Vida y ante el bien del Amor.

    Ir haciendo caminos sobre un yermo de abrojos
    mordidos sobre el áspid de la desilusión,
    con la sed en los labios, la fatiga en los ojos
    y una espina dorada dentro del...

  • Madre, esta llama mía
    que a tí te inquietara un día,
    sigue madre y hoy me abrasa.
    Y es roja, madre, de día
    y por la noche es azul.

    Madre, tus ojos azules,
    siempre azul vieron mi llama.
    Pero yo sé que ella es roja
    a la clara luz del día.

    A la clara luz del día, madre,
    yo he visto a una niña triste
    contradiciendo a la vida....

  • Esta tarde llueve como nunca; y no
    tengo ganas de vivir, corazón.

    Esta tarde es dulce. Por qué no ha de ser?
    Viste gracia y pena; viste de mujer.

    Esta tarde en Lima llueve. Y yo recuerdo
    las cavernas crueles de mi ingratitud;
    mi bloque de hielo sobre su amapola,
    más fuerte que su “No seas así!”

    Mis violentas flores negras; y...