• Crin que al aire te vuela, rizada y bruna,
    parece a mis ahogos humo en fogata;
    y del arpa desprendes la serenata
    divinamente triste, como la luna.

    Y del celo ardoroso despides una
    fragancia de resina; y él te dilata
    ojo que resplandece con luz de plata,
    como en la sombra el vidrio de la laguna.

    Mas tu marido llega, con su fortuna,
    nos...

  • Mi corazón percibe, sueña y presume.
    y como envuelta en oro tejido en gasa,
    la tristeza de Verdi suspira y pasa
    en la cadencia fina como un perfume.

    Y frío de alta zona hiela y entume;
    y luz de sol poniente colora y rasa:
    y fe de gloria empírea pugna y fracasa,
    ¡como en ensayos torpes un ala implume!

    El sublime concierto llena la casa;
    y...

  • -¿Quieres? ¿Vamos a divertirnos?

    Accedió y fueron al café.

    Gente, ruido, baile y música. Música para trasnochadores; música de hotel internacional o de «boite», que era lo que buscaban.

    Parado en una silla, sobre una mesa, peroraba el poeta ebrio, con ojos de amplia pupila, vaga, de cocaína o ajenjo.

    -«Ritmos pseudo-alegres de desenvolvimiento fatal. Cosas...

  •  Eres bella y elegante
    y tu alma extravagante
    en amar no se marchita;
    gozas la dicha completa.
    Dios no te hizo tan coqueta
    al hacerte tan bonita.

     Brotan lujuriosas luces
    de tus ojos andaluces
    y de tu pelo africano,
    y eres como una musmé
    cuyo diminuto pie
    caber podría en mi mano.

     Tienes los labios de fresa
    y las...

  • øøø

       Más rápidos que el rayo,
      Más alados que el viento,...

  • Mía: así te llamas.
    ¿Qué más harmonía?
    Mía: luz del día,
    Mía: rosas, llamas.

     ¡Qué aroma derramas
    En el alma mía
    Si sé que me amas,...

  • Cuánto trabajo ella pasa
    Por corregir la torpeza
    De su esposo, y en la casa,
    ( Permitidme que me asombre).
    Tan inepto como fatuo,
    Sigue él siendo la cabeza,
    Porque es hombre!

    Si algunos versos escribe,
    De alguno esos versos son,
    Que ella sólo los suscribe.
    (Permitidme que me asombre).
    Si ese alguno no es poeta,
    Por qué...

  • De la más fragante rosa
    Nació la abeja más bella,
    A quien el limpio rocío
    Dio purísima materia.

    Nace, pues, y apenas nace,
    Cuando en la misma moneda,
    Lo que en perlas recibió
    Empieza a pagar en perlas.

    Que llora el alba, no es mucho
    Que es costumbre en su belleza;
    Mas ¿quién hay que no se admire
    De que el sol...

  • Era un pobre diablo que siempre venía
    cerca de un gran pueblo donde yo vivía;
    joven, rubio y flaco, sucio y mal vestido,
    siempre cabizbajo... ¡Tal vez un perdido!
    Un día de invierno lo encontraron muerto
    dentro de un arroyo próximo a mi huerto,
    varios cazadores que con sus lebreles
    cantando marchaban... Entre sus papeles
    no encontraron nada......

  • Hermano mío en el arte y en la lira sagrada
    Que de la vieja estigia sentado en un recodo
    Me dices que las cosas de este mundo son nada
    Pero que las del otro, las del celeste, todo

    No siembres esa lívida seta emponzoñada
    En mi jardín de sueños, con tan amable modo
    Sino una vid de vida, de racimos cargada
    Que de alegría deje el corazón beodo