•        El árbol tenía un letrero
    que solo los pájaros podían leer:

    ”Se alquilan ramas para nidos”,
    decían las letras
    que un hombre no habría podido leer.

           A pesar del anuncio,
    ningún pájaro vino
    a hacer su nido
    en este árbol, que muere de tristeza,
    gacha la cabeza,
    al borde del camino.

  • Diciembre de 1918
    (Granada)

    Como un incensario de deseos,
    Pasas en la tarde luminosa y clara
    Con la carne oscura de nardo marchito
    Y el sexo potente sobre tu mirada.

    Llevas en la boca tu melancolía
    De pureza muerta, y en la dionisiaca
    Copa de tu viente la araña que te...

  • Diciembre de 1918
    (Granada)
    A Melchor Fernández Almagro

    Princesa enamorada sin ser correspondida.
    Clavel rojo en un valle profundo y desolado.
    La tumba que te guarda rezuma tu tristeza
    A través de los ojos que ha abierto sobre el mármol.

    Eras una paloma con alma gigantesca...

  • Julio de 1920

    Silencio, ¿dónde llevas
    Tu cristal empañado
    De risas, de palabras
    Y sollozos del árbol?
    ¿Cómo limpias, silencio,
    El rocío del canto
    Y las manchas sonoras
    Que los mares lejanos
    Dejan sobre la albura
    Serena de tu manto?
    ¿Quién cierra tus...

  • A Federico García Lorca, poeta

    Atraviesa la muerte con herrumbrosas lanzas,
    y en traje de cañón, las parameras
    donde cultiva el hombre raíces y esperanzas,
    y llueve sal, y esparce calaveras.

    Verdura de las eras,
    ¿qué tiempo prevalece la alegría?
    El sol pudre la sangre, la cubre de asechanzas
    y hace brotar la sombra más sombría.

    El...

  • A Pablo de la Torriente, comisario político

    "Me quedaré en España, compañero",
    me dijiste con gesto enamorado.
    Y al fin sin tu edificio trotante de guerrero
    en la hierba de España te has quedado.

    Nadie llora a tu lado:
    desde el soldado al duro comandante,
    todos te ven, te cercan y te atienden
    con ojos de granito amenazante,
    con...

  • Ella daba dos pasos hacia adelante
    Daba dos pasos hacia atrás
    El primer paso decía buenos días señor
    El segundo paso decía buenos días señora
    Y los otros decían cómo está la familia
    Hoy es un día hermoso como una paloma en el cielo

    Ella llevaba una camisa ardiente
    Ella tenía ojos de adormecedora de mares
    Ella había escondido un sueño en un...

  • Tú no eres en mi huerto la pagana
    Rosa de los ardores juveniles;
    Te quise como a una dulce hermana

    Y gozoso dejé mis quince abriles.
    Cual un ramo de flores de pureza
    Entre tus manos blancas y gentiles.

    Humilde te ha rezado mi tristeza,
    Como en los pobres templos parroquiales
    El campesino ante la virgen reza.

    Antífona es su voz, y...

  • Hay tardes en las que uno desearía
    embarcarse y partir sin rumbo cierto,
    y, silenciosamente, de algún puerto,
    irse alejando mientras muere el día;

    Emprender una larga travesía
    y perderse después en un desierto
    y misterioso mar, no descubierto
    por ningún navegante todavía.

    Aunque uno sepa que hasta los remotos
    confines de los piélagos...

  •  Ya los de la casa se van acercando
    al rincón del patio que adorna la parra,
    y el cantor del barrio se sienta, templando,
    con mano nerviosa la dulce guitarra.

     La misma guitarra, que aun lleva en el cuello
    la marca indeleble, la marca salvaje
    de aquel...