• Furiosa tempestad se desataba
    cuando, de pieles rústicas vestido,
    Caín con su familia caminaba
    huyendo á la justicia de Jehovah.
    La noche iba á caer. Lenta la marcha
    al pie de una colina detuvieron,
    y á aquel hombre fatídico dijeron
    sus tristes hijos: -descansemos ya.

    Duermen todos excepto el fratricida
    que, alzando su mirada sobre el...

  • Confesándose un soldado

    dijo muy arrepentido:

    -Acúsome que he jodido

    un barril de bacalao.

    El fraile, muy admirado,

    le preguntó: -¿Cómo ha sido?

    -Porque el barril he robado,

    en la plaza le he vendido,

    del dinero que me han dado

    varias veces he jodido,

    aunque no con gran exceso.

    -Toma, toma, dijo el padre,

    según...

  • LA CONFESIÓN

    ¡Señor cura! ¡Señor cura!
    ¿Qué tendré en mi corazón,
    que a veces siento dulzura
    y otras tanta agitación?
    ¿Qué tendré que el alma mía
    ríe y llora sin cesar,
    y a veces siento alegría
    y otras me mata el pesar!
    ¿Qué tendré, que aquí en las sienes
    llega el calor a abrasarme?...
    –¡Hija mía, lo que tienes
    es...

  • LA CONFESIÓN

    –¡Señor cura! ¡Señor cura!
    ¿Qué tendré en mi corazón,
    que a veces siento dulzura
    y otras tanta agitación?
    ¿Qué tendré que el alma mía
    ríe y llora sin cesar,
    y a veces siento alegría
    y otras me mata el pesar?
    ¿Qué tendré, que aquí en las sienes
    llega el calor a abrasarme?...
    –¡Hija mía, lo que tienes
    es...

  • La noche es una copa de mal. Un silbo agudo
    del guardia la atraviesa, cual vibrante alfiler.
    Oye, tú, mujerzuela, ¿cómo, si ya te fuiste,
    la onda aún es negra y me hace aún arder?

    La Tierra tiene bordes de féretro en la sombra.
    Oye, tú, mujerzuela, no vayas a volver.

    A carne nada, nada
    en la copa de sombra que me hace aún doler;
    mi carne nada...

  • Hasta que el pueblo las canta,
    las coplas, coplas no son,
    y cuando las canta el pueblo,
    ya nadie sabe el autor.

    Tal es la gloria, Guillén,
    de los que escriben cantares:
    oír decir a la gente
    que no los ha escrito nadie.

    Procura tú que tus coplas
    vayan al pueblo a parar,
    aunque dejen de ser tuyas
    para ser de los demás.

    ...

  • La coronación se acerca
    y mi pobre Musa helada
    no pica de profetisa,
    ni al rey vaticina hazañas.
    En vano el frío Iriarte
    sus insulsas coplas grazna,
    y en lenguaje de Gaceta
    a Carlos y Luisa canta.
    ¿Qué me importa que Forner
    alce su tremenda vara,
    y en duros y malos versos
    haga por elogios sátiras?
    ¿Que el...

  •  La costurerita que dio aquel mal paso...
    — y lo peor de todo, sin necesidad —
    con el sinvergüenza que no la hizo caso
    después... — según dicen en la vecindad —

     se fué hace dos días. Ya no era posible
    fingir por más tiempo. Daba compasión
    verla...

  • ¡Oh! ¡cuánta rica inmensidad de vida
    Dios aquí para el hombre ha derramado!
    ¡Cuánta savia de fuego hay encendida
    en cada átomo vil de lo creado!

    ¡Magnífica, inmortal naturaleza!
    La creación maravillosa y santa,
    deslumbrante de luz y de grandeza,
    digno templo del hombre se levanta!

    Hierbas y fuentes, pájaros y flores,
    astros, espacios,...

  • LA CRISTALINA CORIENTE

    La cristalina corriente
    De este caudaloso rió,
    Lleva ya el llanto mio
    Mas aguas que de su fuente.
    Llega el mar, y es evidente,
    Que el mar, con ser tan salado,
    Lo recibe alborozados
    Y aun rechazarlo procura,
    por no probar la amargura
    Que mis lagrimas le han dado.