Polvo de oro en tus manos fue mi melancolía
Sobre tus manos largas desparramé mi vida;
Mis dulzuras quedaron a tus manos prendidas;
Ahora soy un ánfora de perfumes vacía.

Cuánta dulce tortura quietamente sufrida
Cuando, picada el alma de tristeza sombría,
...

Amo todo lo extraño, amo todo lo exótico;
lo equívoco y morboso, lo falso y lo anormal:
tan sólo calmar pueden mis nervios de neurótico
la ampolla de morfina y el frasco de cloral.

Amo las cosas mustias, aquel tinte clorótico
de hampones y rameras, pasto del...

Estoy debajo de mis sueños.
Ya ni estrellas ni pájaros nocturnos
levantarán mi canto.

Puente de plata y oro es el amor.

Amada, tú eras el único asidero
pero yo he mirado al abismo
donde ondula (libre de nosotros)
el limo de mis sueños y tus sueños....

Poet: Líber Falco

Fuensanta, dulce amiga,
Blanca y leve mujer,
Dueña ideal de mi primer suspiro
Y mis copiosas lágrimas de ayer;
Enlutada que un día de entusiasmo
Soñé condecorar,
Prendiendo, en la alborada de las nupcias,
En el negro mobiliario de tu pecho
Una...

Señor, en mí me busco y no me encuentro...
¿Dónde la claridad del nuevo día
cuya luz inmortal fulgura dentro
del corazón sin pena ni alegría?

Tú eres la paz, y yo soy la contienda;
tú eres la luz, la noche va conmigo...
Mis ojos, ciegos por la negra venda,...

 El griego musicante ya desafina
en la suave habanera provocadora,
cuando se anuncia a voces, desde la esquina
«el boletín — famoso — de última hora».

 ...

El Alma en los labios fue un poema escrito por Medardo Ángel Silva poco antes de suicidarse; fue un homenaje a su novia Rosa Amada Villegas.
El músico cuencano...

A Modesto Chávez Franco

Las interrogaciones con que, en horas fatales,
queremos sondear la Esencia Verdadera,
son voces a la Esfinge siempre muda, señales
en la sombra que nadie ve de la otra ribera.

Sí...

 Dejó de castigarla, por fin cansado
de repetir el diario brutal ultraje,
que habrá de contar luego, felicitado,
en la rueda insolente del compadraje.

 — Hoy, como...

Antes de echar el ancla en el tesoro
del amor postrimero, yo quisiera
correr el mundo en fiebre de carrera,
con juventud, y una pepita de oro
en los rincones de me faltriquera.

Abrazar a una culebra del Nilo
que de Cleopatra se envuelva en la clámide,
...