• A...

      
    Ya viene la galana primavera
    Con su séquito de aves y de flores,
    Anunciando a la lívida pradera
    Blando engramado y música de amores.
      
    Deja ¡oh amigo! el nido acostumbrado
    Enfrente de la inútil chimenea;
    Ven a mirar el sol resucitado
    Y el milagro de luz que nos rodea.
      
    Deja ese hogar, nuestra invención...

  • Tengo el presentimiento que he de vivir muy poco.
    Esta cabeza mía se parece al crisol,
    Purifica y consume.
    Pero sin una queja, sin asomo de horror,
    Para acabarme quiero que una tarde sin nubes,
    Bajo el límpido sol,
    Nazca de un gran jazmín una víbora blanca
    Que dulce, dulcemente, me pique el corazón.

  •              
     Reina la paz... el olvido
     sus negras alas extiende;
     la soledad aquí mora;
     la humanidad aquí duerme.
     Lentas horas de silencio
     a otras horas se suceden...
     la noche eterna aquí nace;
     la luz del mundo aquí muere.
     Las tinieblas de la nada
     de este lugar se desprenden,
     y la faz del almo cielo
     con su luto...

  • Tres cosas me tienen preso
    de amores el corazón,
    la bella Inés, el jamón
    y berenjenas con queso.

    Esta Inés (amantes) es
    quien tuvo en mí tal poder,
    que me hizo aborrecer
    todo lo que no era Inés.

    Trájome un año sin seso,
    hasta que en una ocasión
    me dio a merendar jamón
    y berenjenas con queso.

    Fue de Inés la...

  • Te había soñado hija de un antiguo mar grave,
    en un negro castillo cerca del Rhin azul;
    unánimes al ritmo de tu sonrisa suave
    charlaban las alondras en fresco abedul.

    Tu perfumada sombra cantaban los poetas
    (eran los bellos días de Erec y Parsifal)
    y tus ojos velados cual obscuras violetas
    causaron la locura de un príncipe feudal.

    Los nelumbos...

  • A Víctor M. Londoño

    El viejo campanario
    toca para el rosario,

    Las viejecitas una a una
    van desfilando hacia el santuario
    y se diría un milenario
    coro de brujas, a la luna.

    Es el último día
    del mes de María.

    Mayo en el huerto y en el cielo:
    el cielo, rosas como estrellas;
    el huerto, estrellas como rosas ...
    Hay...

  • Mes de rosas. Van mis rimas
    En ronda, a la vasta selva,
    A recoger miel y aromas
    En las flores entreabiertas.
    Amada, ven. El gran bosque
    Es nuestro templo, allí ondea
    Y flota un santo perfume
    De amor. El pájaro vuela
    De un árbol a otro y saluda
    Tu frente rosada y bella
    Como a un alba; y las encinas
    Robustas, altas, soberbias,...

  • No sé qué sepultada artillería
    dispara desde abajo los claveles,
    ni qué caballería
    cruza tronando y hace que huelan los laureles.

    Sementales corceles,
    toros emocionados,
    como una fundición de bronce y hierro,
    surgen tras una crin de todos lados,
    tras un rendido y pálido cencerro.

    Mayo los animales pone airados:
    la guerra más se aíra...

  •  Tiene su pelo raros destellos
    cuando de noche sueña en los bancos;
    es la que tiene los ojos bellos;
    es la que tiene los dientes blancos.

     Es juglaresa de las aldeas;
    sus danzas cínicas son turbadoras;
    tiene el encanto de las napeas
    cuando el sol bruñe sus crenchas moras.

     Es la que canta las barcarolas
    y de las rondas saca dinero;
    ...

  • No busquéis aquí, verdad, razón o deducción alguna.

    A otros la enseñanza. A esas enormes cabezas cuadradas, pensantes y rumi-pensantes que hacen de la verde yerba campera un bolo alimenticio.

    Ellos dicen: «mucho de lo que crees hermoso, no es sino cieno».

    No tengo aptitudes de máquina para transformar bellezas en utilidades, y si algo hay de verdad en mis escritos, culpa...