Crié una paloma hermosa,
mi esperanza y mi ilusión,
mas, ella huyó veleidosa...
¡ay, paloma...! ¡ay, corazón...!
Palomita de mi huerto,
de ojos de dulce mirar,
¿conque es cierto, conque es cierto
que huiste del palomar...?
Yo formé del pecho mío
un nido, para ti, fiel,
y ahora lo dejas vacío...