Oye la historia que contome un día
el viejo enterrador de la comarca:
Era un amante a quien por suerte impía,
su dulce bien le arrebató la Parca.
Todas las noches iba al cementerio
a visitar la tumba de la hermosa;
la gente murmuraba con misterio:
Es un muerto escapado de la fosa.
En una horrible noche hizo pedazos
el mármol de la tumba...