¡Ay, Lizardo querido!
si feliz muerte conseguir esperas,
es justo que advertido,
pues naciste una vez,
dos veces mueras.
Así las plantas, frutos y aves lo hacen:
dos veces mueren y una sola nacen.

Entre catres de armiño
tarde y mañana la azucena...

Cuando estoy á par contigo
 Se renueva la creación;
Más vivífico es el aire,
 Más hermoso alumbra el sol.
Tu presencia es luz radiante,
...

Poet: Thomas Moore

El Pajarito, madre,

después que me picó,

me ha dejado burlada.

¡Ay de mi, qué dolor!

El Pájaro ya voló.

El Pájaro era blanco,

travieso y juguetón,

de pluma crespa y negra,

con pico de arrebol.

Estando yo solita

...

Nunca osara, Señor, la Musa mía
Al eco unir del general aplauso
Los ecos de un aliento que se apaga
Por la desgracia y por la edad cansado.

Ved cómo yace envuelta en largo olvido
Mi inútil lira: trémula la mano
Va sus cuerdas a herir, y a hallar no acierta...

Nunca osara, Señor, la Musa mía
Al eco unir del general aplauso
Los ecos de un aliento que se apaga
Por la desgracia y por la edad cansado.

Ved cómo yace envuelta en largo olvido
Mi inútil lira: trémula la mano
Va sus cuerdas a herir, y a hallar no acierta...

Una noche de enero,

estaba calentándose al brasero

una joven casada,

la ropa a las rodillas remangada,

porque así no temía

quemarse en tanto que labor hacía.

De este modo esperaba a su marido,

que era un pobre artesano,

mientras entretenido...

La blanda primavera
derramando aparece
sus tesoros y galas
por prados y vergeles.

Despejado ya el cielo
de nubes inclementes,
con luz cándida y pura
ríe a la tierra alegre.

El alba de azucenas
y de rosa las sienes
se presenta...

Ya de mis verdes años
como un alegre sueño
volaron diez y nueve
sin saber dónde fueron.

Yo los llamo afligido,
mas pararlos no puedo,
que cada vez más huyen
por mucho que les ruego;

y todos los tesoros
que guarda en sus mineros...

Pensaba cuando niño
que era tener amores
vivir en mil delicias,
morar entre los dioses.

Mas luego rapazuelo
Dorila cautivome,
muchacha de mis años,
envidia de Dïone,

que inocente y sencilla,
como yo lo era entonces,
fue a mis...

La rosa de Citeres,
primicia del verano,
delicia de los dioses
y adorno de los campos,

objeto del deseo
de las bellas, del llanto
del Alba feliz hija,
del dulce Amor cuidado,

¡oh, cuán atrás se queda
si necio la comparo
en...