Ya de suena de la santa Ave María
la solemne campana, que el ocaso
llorar parece del lejano día:
Como de encanto súbito por caso,
Sucede hondo silencio de repente,
al urbano bullicio; el presto paso
detiene al son la pasajera gente,
que con rápida mano...

¡Qué horror! Mi duda insulta al Dios que anhelo.
Yo necesito orar; ¡estoy tan solo!
Yo te busco, Señor, en mi camino.
¿Dónde estás? ¿dónde estás? Caigo de hinojos,
Junto las manos y la frente inclino.

(En el día de mi natalicio)

En este día, como la aurora al mundo,
me mandaste, Señor;
yo te bendigo Espíritu fecundo,
Supremo Creador.

Dichoso o infeliz, Luz de la vida,
mi voz te cantará;
regocijada el alma o abatida
siempre te ensalzará...

Señor, tu nombre santo
celebra la voz mía
en armonioso canto,
cuando brilla la luz del nuevo día.

Tú mandaste a tu sol que disipara
las sombras de la noche, y obediente
por la inflamada esfera
emprende su magnífica carrera.

Vida, belleza, acción...

Como a un ángel que afeitan, vivo siempre sentado,
empuñando algún vaso de profundas estrías;
doblado el hipogastrio, miro cómo han zarpado
del puerto de mi pipa tenues escampavías...

Cual cálida inmundicia que un palomar ha hollado,
me abrasan dulcemente múltiples...

¡Señor, tenme piedad, aunque a ti clame
sin fe! ¡perdona que te niegue o riña
y el ara tienda con bochorno infame!

Vuelvo al antiguo altar. ¡No en vano ciña
guirnaldas a un león y desparrame
riego que pueda prosperar tu viña!

¡Líbrame por merced, como te...