De mis cantares: Oda I

Tras una mariposa, cual zagalejo simple, corriendo por el valle la senda a perder vine. Recosteme cansado, y un sueño tan felice me asaltó que aún gozoso mi labio lo repite. Cual otros dos zagales de belleza increíble, Baco y Amor se llegan a mí con paso libre; Amor un dulce tiro riendo me despide, y entrambas sienes Baco de pámpanos me ciñe. Besáronme en la boca después, y así apacibles, con voz muy más süave que el céfiro me dicen: «Tú de las roncas armas ni oirás el son terrible, ni en mal seguro leño bramar las crudas sirtes. La paz y los amores te harán, Batilo, insigne; y de Cupido y Baco serás el blando cisne».

Collection: 
1774

More from Poet

  • Pensativo y lloroso, contemplando cuán tibia Dorila mi amor oye por hermosa y por niña, al margen de una fuente me asenté cristalina, que un rosal adornaba con su pompa florida. El voluble murmullo de sus plácidas linfas, de mis penas agudas amainaba las iras; y en sus ondas rientes encantada la...

  • Viendo el Amor un día que mil lindas zagalas huían de él medrosas por mirarle con armas, dicen que de picado les juró la venganza y una burla les hizo, como suya, extremada. Tornose en mariposa, los bracitos en alas, y los pies ternezuelos en patitas doradas. ¡Oh!, ¡qué bien que parece! ¡Oh!, ¡...

  • Un día que en la vega, bajo el nogal copado que da a su fuente sombra con los pomposos ramos, cantaba entretenido con inocente labio de mi suerte la dicha, las delicias del campo, casi a mis pies seguras se bañaban jugando las sencillas palomas en un limpio remanso. Su bullicio y arrullos, y sus...

  • Ved, amigos, cuál llega ya delicioso el mayo, en las plácidas alas del Céfiro llevado. Grata Flora en su obsequio le engalana los campos, mil flores por doquiera desparciendo su mano. Cojamos las más lindas; y alegres emulando las risas y banquetes que libre canta Horacio, de hiedra coronadme,...

  • Ya torna mayo alegre con sus serenos días, y del amor le siguen los juegos y la risa. De ramo en ramo cantan las tiernas avecillas el regalado fuego que el seno les agita, y el céfiro jugando con mano abre lasciva el cáliz de las flores y a besos mil las liba. Salid, salid, zagalas; mezclaos a...