•  Les tiene preocupados y tristes la tardanza
    de la hermana. Los niños no juegan con el gato,
    ni recuerdan ahora lo de la adivinanza
    que propusiera alguno, para pasar el rato.

     De vez en cuando, el padre mira el reloj. Parecen
    más largos los minutos. Una...

  • El rosal en su inquieto modo de florecer
    va quemando la savia que alimenta su ser.
    ¡Fijaos en las rosas que caen del rosal;
    tantas son que la planta morirá de este mal!
    El rosal no es adulto y su vida impaciente
    se consume al dar flores precipitadamente.

  • Fue en un poniente mágico de púrpura y oros:
    con música de brisas en los pinos sonoros,
    rítmicas desfilaban las horas, al ocaso,
    tal una ronda griega cincelada en un vaso;
    un terciopelo verde parecía la pampa
    y el cromo era lo mismo que una eglógica estampa.

    Escuchaban los valles la Palabra Infinita
    con que Él habla a las cosas:
    a las humildes...

  • ¡Oh el mar aventurero, indómito y fluctuante,
    altivo como el viento, como el pájaro errante!
    Fuente inmortal de ideales, su alma limpia y cantora,
    llena de azules voces la esbelta cantimplora
    que a la luz matinal sorbe, alegre, el barquero,
    y exalta el desvarío del segundón postrero,
    que quita el rancio orín de su escudo sonoro
    anheloso de glorias...

  • Llovía torrencialmente
    Y en la estancia del Mojón
    Como adorando al fogón
    Estaba tuita la gente.
    Dijo un viejo en redepente:
    "Les voy a contar un cuento
    Aura que el agua y el viento
    Train a la memoria mía...
    Cosas que naide sabía
    Y que yo diré al momento.

    "Tal vez tenga que luchar
    Con mas de un inconveniente
    Pa' que...

  • Desde mi torre de marfil
    miro la vida que discurre.
    Mi alma romántica y sutil
    suspira, sonríe y se aburre.

    Hay un jardín de negras rosas,
    hay un jardín de blancos lirios:
    son mis tristezas negras rosas,
    mis ilusiones blancos lirios.

    A veces en el aire azul,
    solloza el viento un miserere,
    huye un ave de alas de tul:
    es algún...

  • Encima
    de la azucena esquinada
    que orna la cadavérica almohada;
    encima
    del soltero dolor empedernido
    de yacer como imberbe congregante
    mientras los gatos erizan el ruido
    y forjan una patria espeluznante;
    encima
    del apetito nunca satisfecho,
    de la cal
    que demacró las conciencias livianas,
    y del desencanto...

  • Me impongo la costosa penitencia
    de no mirarte en días y días, porque mis ojos,
    cuando por fin te miren, se aneguen en tu esencia
    como si naufragasen en un golfo de púrpura,
    de melodía y de vehemencia.

    Pasa el lunes, y el martes, y el miércoles... Yo sufro
    tu eclipse ¡oh criatura solar! mas en mi duelo
    el afán de mirarte se dilata
    como una...

  • Mañana, bajo el peso de los años,
    Las buenas gentes me verán pasar,
    Mas bajo el peño oscuro y la piel mate
    Algo del muerto fuego asomará.

    Y oiré decir: ¿quién es esa que ahora
    Pasa? Y alguna voz contestará:
    -Allá en sus buenos tiempos
    Hacía versos. Hace mucho ya.

    Y yo tendré mi cabellera blanca,
    Los ojos limpios, y en mi boca habrá
    ...

  • Mira cómo los niños,
    en un aire y tiempo de otro tiempo,
    ríen.
    Cómo en su inocencia,
    la Tierra es inocente
    y es inocente el hombre.
    Míralos cómo al descubrir la muerte
    mueren, y ya definitivamente
    ya sus ojos y dientes
    comienzan a crecer junto a las horas.

    Deja que ellos guarden sin saberlo,
    el secreto último de su inocencia...