Mi corazón leal, se amerita en la sombra.
Yo lo sacara al día, como lengua de fuego
que se saca de un ínfimo purgatorio a la luz;
y al oírlo batir su cárcel, yo me anego
y me hundo en ternura remordida de un padre
que siente, entre sus brazos, latir un hijo ciego....
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A Jesús Villalpando
Mi madrina invitaba a mi prima Águeda Águeda aparecía, resonante |
Si yo jamás hubiera salido de mi villa, Tendría, entre corceles y aperos de labranza Quizá tuviera dos hijos, y los tendría |
Noble señora de provincia: unidos De los rústicos tiestos florecidos |
Yo tuve, en tierra adentro, una novia muy pobre: |
Se distraen las penas en los cuartos de hoteles Media luz... copia al huésped la desconchada luna |
¿Dónde estará la niña Gemía el vals por ella, ... |
Fuensanta: las finezas del Amado La corona de espinas, El madero pesado |
He vuelto a media noche a mi casa, y un canto |
Doy a los cuatro vientos los loores Saben de las domésticas labores |