A pedir la limosna acostumbrada

a una granja del pueblo separada,

llegó un fornido lego franciscano,

y encontró de carácter muy humano

a una viuda y joven labradora

que era de aquella granja la señora.

Esta, luego que vio tan colorado

al lego, tan...

Un novicio tenía en su convento

el entretenimiento,

cuando a solas estaba,

de tocarse el guión que le colgaba,

porque, como del claustro no salía,

gozar de otros placeres no podía.

Sorprendiole en sus sucios ejercicios

una vez el maestro de...

En la ciudad alegre y renombrada

que riega, saltarín, Guadalmedina,

empezó a padecer de mal de orina

una recién casada

de edad de veinte años,

a quien vinieron semejantes daños

de que su viejo esposo

setentón lujurioso,

por más esfuerzos...

Señor don Juan, quedito, que me enfado.
¿Besar la cara? Es mucho atrevimiento.
¿Abrazos? ¡Ay Jesús!, no lo consiento.
¿Cosquillas? No las hay por ese lado.

¿Remangarme? ¡Ay, Juanito!, ¿y el pecado?
¡Qué malos sois los hombres!... Pasos siento.
¿No...

En un día muy festivo

estaba una mercadera

sentada en silla poltrona

a la puerta de su tienda.

Su postura era chocante

porque tenía ambas piernas

demasiado separadas,

y así con razón se lleva

la atención de los que pasan.

Entre todos...

Un cura y su criada en una aldea

la noche de difuntos

se calentaban juntos

al fuego de una grande chimenea.

La doncella era joven y graciosa

tanto como inocente,

y el cura un hombre ardiente,

de barriga y gordura prodigiosa,

porque siempre...

Una soltera muy escrupulosa

casarse rehusaba,

y decía a su madre que pensaba

que hacer la mala cosa

aun después de casada era pecado.

Un bigardón del caso fue informado,

y, habiéndose en la casa introducido

y hallándose querido,

pidió a la...

Iba a Jerusalén acompañada

de su esposo una joven remilgada

de carácter tan serio

que, aparentando un sano beaterio,

siempre que su marido la embestía

inmóvil en la acción se mantenía;

y él, creyendo que en ella

duraba la vergüenza de doncella,...

En la Puerta del Sol, según costumbre,

haciendo el corro andaba

por la noche una moza

que, aunque ya poca lumbre

este oficio la daba,

siempre la que lo ejerce en él se goza.

Al dar una virada,

se halló de cierto quidam abordada,

que,...

Erase en una aldea

un médico ramplón, y a más casado

con una mujer joven y no fea,

la que había estudiado

entre los aforismos de su esposo

uno u otro remedio prodigioso

que, si él ausente estaba,

a los enfermos pobres recetaba.

Su caridad...