Oda en métrica antigua

No creía que algún día aprenderé morir;

Eternamente joven, envuelto en mi capa,

Mis ojos soñadores levantaba hacia la estrella

De la soledad.

Súbitamente llegaste en mi camino,

Tú, sufrimiento, dolorosamente dulce...

Hasta el fondo bebí la voluptuosidad de la muerte

Implacable.

Patéticamente estoy ardiendo vivo, atormentado como Neso,

O como Hercules envenenado por sus ropas;

Mi fuego no lo puedo apagar con todas las aguas

Del mar.

Por mi propio sueño, abrasado, me lamento,

Sobre mi propia hoguera me estoy derritiendo...

¿ Puedo resucitar luminosamente como

El ave Fénix ?

Que desaparezcan los ojos inquietantes de mi camino,

Ven otra vez en mi seno, indiferencia triste;

Para poder morir tranquilamente, devuelveme

¡ A mi propio ser !

Collection: 
1870

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