• ¡Salve, divina emperatriz del cielo,
            Como la gracia pura,
    Mística luz de paz y de consuelo,
            Tesoro de hermosura!

    ¡Salve, limpio fanal resplandeciente
            De donde el sol fecundo
    Toma su luz para lanzarla ardiente
            Al adormido mundo!

    ¡Salve otra vez! ¡mil veces salve, oh fruto
            Del grande pensamiento...

  • I
    Dime coplas, musa mía.
    ¿Me las niegas por vulgares?
    ¿Me reprendes la osadía
    de que en coplas populares
    quiera cantar a María?

    ¿Murmuras avergonzada
    porque en la ruda tonada
    de esta mortal criatura
    no cabe la gran figura
    de María Inmaculada?

    ¡Bien lo sé yo, musa mía!
    El gran himno de María
    no lo rima ni lo canta...