• ¿Con que al fin, tirano dueño,
    Tanto amor, clamores tantos,
    Tantas fatigas,
    No han conseguido en tu pecho
    Más premio que un duro golpe
    De tiranía?

    Tú me intimas que no te ame
    Diciendo que no me quieres,
    ¡Ay vida mía!
    ¡Y que una ley tan tirana
    Tenga de observar, perdiendo
    Mi triste vida!

    Yo procuraré olvidarte,
    Y...

  • Ya mi triste desventura
    No deja
    Esperanza de tener
    Alivio;
    Y el buscarlo solo sirve
    De darme
    El tormento de mirarlo
    Perdido.

    En vano huiré buscando
    Regiones
    Donde olvidar á mi dueño
    Querido:
    Con la distancia tendrá
    Mi pecho
    Sus recelos y su amor
    Más fijos.

    Lloraré cuando estes lejos
    Mis...

  • Ya que para mí no vives,
    Y no te han de ver mis ojos,
    Pues te he perdido;
    Daré lugar á mis penas
    En la triste soledad
    En que hoy me miro.

    Tu me intimas el precepto
    De que olvide para siempre
    Tus atractivos.
    Cuando solo con la muerte
    Sepultaré esta memoria
    En el olvido.

    Te lloraré eternamente
    Como prenda inseparable...

  • Silencio. Aquí se ha hecho ya de noche,
    ya tras del cementerio se fue el sol;
    aquí se está llorando a mil pupilas:
    no vuelvas; ya murió mi corazón.
    Silencio. Aquí ya todo está vestido
    de dolor riguroso; y arde apenas,
    como un mal kerosene, esta pasión.

    Primavera vendrá. Cantarás «Eva»
    desde un minuto horizontal, desde un
    hornillo en que...

  • Yo amo el recuerdo de esas épocas desnudas,
    En que Febo se complacía en dorar las estatuas,
    Cuando el hombre y la mujer en su agilidad
    Gozaban sin mentira y sin ansiedad,
    Y, el cielo amoroso acariciándoles el lomo,
    Desplegaban la salud de su noble máquina.
    Cibeles, entonces, fértil en frutos generosos,
    No estimaba sus redes un peso muy oneroso,
    ...

  • øøø

     «Yo en mi lecho de abrojos,
    Tú en tu lecho de rosas y de plumas,
    Verdad dijo el que dijo que un abismo
    Media entre mi miseria y tu fortuna.
      Mas yo...

  • Yo escucho los cantos
    de viejas cadencias,
    que los niños cantan
    cuando en coro juegan,
    y vierten en coro
    sus almas que sueñan,
    cual vierten sus aguas
    las fuentes de piedra:
    con monotonías
    de risas eternas,
    que no son alegres,
    con lágrimas viejas,
    que no son amargas
    y dicen tristezas,
    tristezas de amores...

  • Yo mi sobretodo verde
    yo mi cáscara de nuez
    yo mi gota de agua
    mi río
    mi árbol
    yo corcel galopando en una orilla
    brazos del viento descansando en los árboles
    me acostaré tal vez quién sabe en dónde
    en el polvo o en un mosquito
    para ser el grito de un cocodrilo
    o las manos abrazadas al fondo de un río
    yo en una hoja caído
    ...

  • Yo no he olvidado, vecina a la ciudad,
    Nuestra blanca morada, pequeña pero tranquila;
    Su Pomona de yeso y su vieja Venus
    En un bosquecillo insignificante ocultando sus miembros desnudos,

    Y el sol, en la tarde, refulgente y soberbio,
    Que, detrás del cristal en que se quebraba su gavilla,
    Parecía, ojo inmenso abierto en el cielo curioso,
    Contemplar...

  • Yo no soy demasiado sabio para negarte,
    Señor; encuentro lógica tu existencia divina;
    me basta con abrir los ojos para hallarte;
    la creación entera me convida a adorarte,
    y te adoro en la rosa y te adoro en la espina.
    ¿Qué son nuestras angustias para querer
    por argüirte de cruel? ¿Sabemos por ventura
    si tú con nuestras...