• I

    Para el niño, enamorado de mapas y estampas,
    El universo es igual a su vasto apetito.
    ¡Ah! ¡Cuan grande es el mundo a la claridad de las lámparas!
    ¡Para las miradas del recuerdo, el mundo qué pequeño!

    Una mañana zarpamos, la mente inflamada,
    El corazón desbordante de rencor y de amargos deseos,
    Y nos marchamos, siguiendo el ritmo de la onda...

  • Desde este tren de ensueño,
    ferrocarril, humo negro, vía,
    mirad a las gallinas picoteando en la tierra.
    El rancho en la hondonada.
    La vaca triste.
    Y el alma mía que les canta.
    La vaca triste. El rancho en la hondonada.
    Desde este tren de ensueño,
    nada...

    He de cantarle entonces
    a las tinas solas.
    Se fueron las lavanderas
    ...

  • Está en la sala familiar, sombría,
    y entre nosotros, el querido hermano
    que en el sueño infantil de un claro día
    vimos partir hacia un país lejano.
    Hoy tiene ya las sienes plateadas,
    un gris mechón sobre la angosta frente,
    y la fría inquietud de sus miradas
    revela un alma casi toda ausente.
    Deshójanse las copas otoñales
    del parque...

  • A los que hemos mirado –en una noche horrenda–
    a nuestra cabecera la faz de la Ignorancia,
    puesto que comprendimos, se nos cayó la venda
    y tenemos la ciencia de la sonrisa helada.

    Y vimos –presentimos más– la cosa estupenda
    y la tiniebla en que se hundirá nuestra nada
    y la noche absoluta en la perdida senda
    sin amores, sin albas, sin fin de la jornada...

  • El viejo pozo de mi vieja casa
    sobre cuyo brocal mi infancia tantas veces
    se clavaba de codos, buscando el vaticinio
    de la tortuga, o bien el iris de los peces,
    es un compendio de ilusión
    y de históricas pequeñeces.

    Ni tortuga, ni pez; sólo el venero
    que mantiene su estrofa concéntrica en el agua
    y que dio fe del ósculo primero
    que por...

  • Por doquiera se ostentaba, se derramaba, se solazaba el pueblo en holgorio. Era una solemnidad de esas que, con mucha antelación, son esperanza de los saltimbanquis, de los prestidigitadores, de los domadores de bichos y de los vendedores ambulantes, para compensar los malos tiempos del año.

    En días así, el pueblo me parece que se olvida de todo, del dolor y del trabajo; se vuelve como...

  • Cruza un arroyo inocente
    Sobre un campo de esmeralda,
    Y á su orilla crece un sauce
    Reflejándose en sus aguas.
    En sus trasparentes ondas,
    Serenas, limpias y mansas.
    Varios descuidados cisnes
    Su blanco plumaje, bañan.
    Los pintados pajarillos,
    Saltando de rama en rama,
    Enamorados y alegres,
    Con su dulces trinos cantan.
    Y las...

  • OYES? Ya baja á nuestro espacio umbrío
            De las etéreas salas
    El viento de la noche rudo y frío
    Rasgando nubes con sus negras alas.

    Oyes? Como rumor de tristes voces....
    Ecos de llanto, vuelos de suspiros....
    Como tropel de ayes.... como voces
    De incomprensibles y volubles jiros....

    Es que el viento recoje con empeño
    Escorias de...

  • ¡Hoy el espacio muestra todo su esplendor!
    Sin freno, sin espuelas, sin bridas.
    ¡Partamos, cabalgando sobre el vino
    Hacia un cielo mágico y divino!

    Cual dos ángeles a los cuales tortura
    Una implacable calentura,
    En el azul diáfano de la mañana
    ¡Sigamos hacia el espejismo lejano!

    Muellemente mecidos sobre las alas
    Del torbellino...

  • Frecuentemente, al claro fulgor de un reverbero
    Del cual bate el viento la llama y atormenta el vidrio,
    En el corazón de un antiguo arrabal, laberinto fangoso
    Donde la humanidad bulle en fermentos tempestuosos,

    Se ve un trapero que llega, meneando la cabeza,
    Tropezando, y arrimándose a los muros como un poeta,
    Y, sin cuidarse de los polizontes, sus sombras...