¡Oh! ¡cuánta rica inmensidad de vida
Dios aquí para el hombre ha derramado!
¡Cuánta savia de fuego hay encendida
en cada átomo vil de lo creado!

¡Magnífica, inmortal naturaleza!
La creación maravillosa y santa,
deslumbrante de luz y de grandeza,
digno...

Yo diviso rodando marchita
sin aroma la cándida flor
que furioso huracán precipita
resonando con triste fragor.

De mi seno se lleva la calma,
mis ensueños de gloria, de paz,
y en lugar de la dicha del alma,
solo queda un recuerdo fugaz.

En un...

I

Aquí, donde la mano de un Dios omnipotente
talló para su gloria gigante pedestal;
aquí donde levantan salvaje y elocuente
las ondas y el desierto, las brisas y el torrente,
en nubes de armonías, un...

Solo, como la palma del desierto,
mudo, como la boca del abismo,
triste, como la noche del recuerdo,
vago, como la niebla del vacío ;
    árbol sin hojas,
    astro caído ;
tal era el hombre en la primer mañana,
sonámbulo del sueño del destino.

...

Todo está como era entonces:
La casa, la calle, el río,
Los árboles con sus hojas
Y las ramas con sus nidos.

Todo está, nada ha cambiado,
El horizonte es el mismo;
Lo que dicen esas brisas
Ya, otras veces, me lo han dicho.

Ondas, aves y...

A MARÍA

Cuenta la vieja leyenda
de una raza desgraciada,
que fué en los pasados siglos
de esta tierra soberana

raza que tuvo su historia,
pero una historia de lágrimas,
copiosa como los ríos
que bajan de sus...

Surge a veces en el llano,
y en la loma a veces brota,
susurrando mansamente
como de una arteria rota
cristalino manantial.

Manantial inagotable
cuya linfa fresca y pura
se desliza misteriosa
bajo arcadas de verdura,
como sierpe de cristal...

Son preciosos
mis pollitos
menuditos.
Son tan tiernos,
tan chiquitos,
tan sedosos,
tan finitos,
que en el mundo
no hay pollitos
tan bonitos.

Pían, corren,
hurgan, saltan,
buscan, chillan,
vienen, van,
se...

AL GENERAL URQUIZA

Aun otra vez callada, lira mía,

Aun otra vez el himno de los bravos
Turbe el silencio de la noche umbría
Y hiele el corazón de los esclavos.

E. Gil.

Mil vientos contrarios azoten mi...

VERSOS LEÍDOS POR LA SEÑORITA AGUSTINA ANDRADE EN EL LICEO DE CONCORDIA

Tiembla la selva y al cielo envía
como las notas de una canción,
nubes de aromas y de armonía,
    blandos suspiros,
    que en dulces giros
    y en ondas mágicas
vagan del aire...