• Pues no hay pariente ni amigo
    que, de mis penas testigo,
    no me repita el consejo
    de que, antes que llegase a viejo,
    busque el conyugal abrigo,
    respondo a todos al par:
    mañana voy al altar,
    si por mujer me dais una
    que en sí las prendas reúna
    que comienzo a enumerar.
    Es lo primero que anhelo,
    que la adorne virtud tanta,
    que...

  • La Mancha y sus mujeres... Argamasilla, Infantes,
    Esquivias, Valdepeñas. La novia de Cervantes,
    y del manchego heroico, el ama y la sobrina
    —el patio, la alacena, la cueva y la cocina,
    la rueca y la costura, la cuna y la pitanza—,
    la esposa de don Diego y la mujer de Panza,
    la hija del ventero, y tantas como están
    bajo la tierra, y tantas que son y...

  • ¡AH! yo la vi, divina, encantadora,
    En la mitad de mi árido camino,
    Como la luz de la rosada aurora.
    Como la playa el náufrago marino.

    Hubo un tiempo en que solo recorría
    El vasto erial del fementido mundo,
    Rendido por letal melancolía,
    Lleno mi pecho de dolor profundo.

    Una funesta noche, ¡noche horrible,
    Que nunca olvida la memoria mía!...

  • «En verdad, querida, me molestáis sin tasa y compasión; diríase, al oíros suspirar, que padecéis más que las espigadoras sexagenarias y las viejas pordioseras que van recogiendo mendrugos de pan a las puertas de las tabernas.

    Si vuestros suspiros expresaran siquiera remordimiento, algún honor os harían; pero no traducen sino la saciedad del bienestar y el agobio del descanso. Y, además...

  • Comme le souvenir
    d'un grand cygne de neige
    aux longues,
    longues plumes.

    SAMAIN


    Fue como un cisne blanco que se aleja
    y se aleja, suave, dulcemente
    por el cristal azul de la corriente,
    como una vaga y misteriosa queja.

    Me queda su...

  • Te escribo, aunque ya sé que ninguna mujer
    debe escribir;
    lo hago, para que lejos en mi alma puedas leer
    cómo al partir.

    No he de trazar un signo que en ti mejor grabado
    no exista ya.
    De quien se ama, el vocablo cien veces pronunciado
    nuevo será.

    La dicha sea contigo; yo sólo he de esperar,
    y aunque distante,
    yo me siento ir a ti...