• ¡No intentes convencerme de torpeza
    con los delirios de tu mente loca!
    ¡Mi razón es a la par luz y firmeza,
    firmeza y luz como el cristal de roca!

    ¡Semejante al nocturno peregrino
    mi esperanza inmortal no mira el suelo:
    no viendo más que sombra en el camino,
    sólo contempla el esplendor del cielo!

    ¡Vanas son las imágenes que entraña
    tu...

  •  Aunque no alcancen gloria,
    Pensé escribiendo libro tan pequeño,
    Son fáciles y breves mis canciones,
    Y acaso alcancen mi anhelado sueño.
    Pues bien puede guardarlas la memoria
    Tal como pese al tiempo y la distancia
    Y al fuego asolador de las pasiones
    Sabe guardar, las que aprendió en la infancia,...

  • ¡Qué hermoso es Dios, qué hermosa su cabeza!
    ¡Qué gallardo su andar, su voz qué suave!
    Rasgos los cielos son de su belleza,
    pasos los siglos de su marcha grave;
    la voz de la inmortal naturaleza
    de sus conciertos la sonora clave,
    su acento arroba, su mirar abrasa,
    tiembla el mundo a sus huellas cuando pasa.
    Yo me enamoro dél: pobre doncella...

  • Puso Dios en mis cántabras montañas
    Auras de libertad, tocas de nieve,
    Y la vena del hierro en sus entrañas.
    Tejió del roble de la adusta sierra
    Y no del frágil mirto su corona;
    Que ni falerna vid ni ático olivo,
    Ni siciliana mies ornan sus campos,
    Ni allí rebosan las colmadas trojes,
    Ni rueda el mosto en el lagar hirviente;
    Pero...

  •  ¡Oh, cuánto el hombre por brillar se afana!,
     insecto que ignorado se desliza;
     en vano con orgullo se engalana
     ese poco de polvo y de ceniza,
     que si hoy se mueve, morirá mañana.
     

     ¡Qué incesante anhelar, qué ciego empeño
     por gozar de una vida transitoria!
     Y, ¿qué es la dicha, al fin, y qué es la gloria?
     Niebla que pasa, momentáneo...