• Lejos, bastante lejos,
    del pueblo mío,
    encerrado en un monte
    triste y sombrío,
    hay un valle tan lindo
    que no hay quien halle
    un valle tan ameno
    como aquel valle.

    Entre sus arboledas,
    por la espesura
    solitaria y tranquila,
    corre y murmura
    una fuente tranquilina
    y bullanguera,
    a que dieron por nombre
    ...