Tú no sabes, más yo he soñado
entre mis sueños color de armiño,
horas de dicha con tus amores,
besos ardientes, quedos suspiros
cuando la tarde se tiñe de oro
esos espacios que juntos vimos,
cuando mi alma su vuelo emprende
a las regiones de lo...
|
A veces, cuando en alta noche tranquila, |
Noble como la cándida adorada |
No fue pasión aquello, |
A M. Valenzuela Cual la naturaleza Vagas... |
El verso es un beso santo. ¡Poned en él tan sólo, ¡Allí verted las flores que en la continua lucha |
El pobre Juan de Dios, tras de los éxtasis Enamorado luego de la histérica Luisa,... |
En la tarde, en las horas del divino Sobre un fondo de tonos nacarados |
Es la hora de misterio en que el labriego |
Junto a la cuna aún no está encendida Los niños, cansados, suspenden los juegos, |