• I
    En Los paisajes de Mansiche labra
    imperiales nostalgias el crepúsculo;
    y lábrase la raza en mi palabra,
    como estrella de sangre a flor de músculo.

    El campanario dobla... No hay quien abra
    la capilla... Diríase un opúsculo
    bíblico que muriera en la palabra
    de asiática emoción de este crepúsculo.

    ...

  • Ni sé para quién es esta amargura!
    Oh, Sol, llévala tú que estás muriendo,
    y cuelga, como un Cristo ensangrentado,
    mi bohemio dolor sobre su pecho.
    El valle es de oro amargo;
    y el viaje es triste, es largo.

    Oyes? Regaña una guitarra. Calla!
    Es tu raza, la pobre viejecita
    que al saber que eres huésped y que te...

  • Ir muriendo y cantando. Y bautizar la sombra
    con sangre babilónica de noble gladiador.
    Y rubricar los cuneiformes de la áurea alfombra
    con la pluma del ruiseñor y la tinta azul del dolor.

    ¿La Vida? Hembra proteica. Contemplarla asustada
    escaparse en sus velos, infiel, falsa Judith;
    verla desde la herida, y asirla en la mirada,
    incrustando un capricho...

  • Amada: no has querido plasmarte jamás
    como lo ha pensado mi divino amor.
    Quédate en la hostia,
    ciega e impalpable,
    como existe Dios.

    Si he cantado mucho, he llorado más
    por ti ¡oh mi parábola excelsa de amor!
    Quédate en el seso,
    y en el mito inmenso...

  • Un libro quedó al borde de su cintura muerta,
    un libro retoñaba de su cadáver muerto.
    Se llevaron al héroe,
    y corpórea y aciaga entró su boca en nuestro aliento;
    sudamos todos, el hombligo a cuestas;
    caminantes las lunas nos seguían;
    también sudaba de tristeza el muerto.

    Y un libro, en la batalla de Toledo,
    un libro, atrás un libro, arriba un...

  • Me moriré en París con aguacero,
    un día del cual tengo ya el recuerdo.
    Me moriré en París -y no me corro-
    talvez un jueves, como es hoy de otoño.

    Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
    estos versos, los húmeros me he puesto
    a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto,
    con todo...

  • Padre polvo que subes de España,
    Dios te salve, libere y corone,
    padre polvo que asciendes del alma.

    Padre polvo que subes del fuego,
    Dios te salve, te calce y dé tu trono,
    padre polvo que estás en los cielos.

    Padre polvo, biznieto del humo,
    Dios te salve y ascienda a infinito,
    padre polvo, biznieto del humo.

    Padre polvo en que acaban...

  • Yo digo para mí: por fin escapo al ruido;
    nadie me ve que voy a la nave sagrada.
    Altas sombras acuden,
    y Darío que pasa con su lira enlutada.

    Con paso innumerable sale la dulce Musa,
    y a ella van mis ojos, cual polluelos al grano.
    La acosan tules de éter y azabaches dormidos,
    en tanto sueña el mirlo de la vida en su mano.

    Dios mío, eres...

  • Pasamos juntos. El sueño
    lame nuestros pies qué dulce;
    y todo se desplaza en pálidas
    renunciaciones sin dulce.

    Pasamos juntos. Las muertas
    almas, las que, cual nosotros,
    cruzaron por el amor,
    con enfermos pasos ópalos,
    salen en sus lutos rígidos
    y se ondulan en nosotros.
    Amada, vamos al borde
    frágil de un montón de tierra....

  • Me siento bien. Ahora
    brilla un estoico hielo
    en mí.
    Me da risa esta soga
    rubí
    que rechina en mi cuerpo.

    Soga sin fin,
    como una
    voluta
    descendente
    de
    mal...
    soga sanguínea y zurda
    formada de
    mil dagas en puntal.

    Que vaya así, trenzando
    sus rollos de crespón;
    y que ate el gato trémulo
    ...