De azul y plata adornada está la rauda cascada; azul el ancho horizonte; verde la hermosa enramada, y la pradera y el monte. Luce la lozana flor sus perfumes y sus galas; y entona cantos de amor ese poema con alas que llamamos ruiseñor. Las arboledas sombrías se cubren con verdes velos; y báñanse, en armonías, esas noches que son días y esos días que son cielos. El aire se halla inflamado, y la hermosa con su amado, a los rayos de la luna, cruza en bajel nacarado la brilladora laguna. Todo es luz, brisas, colores, ambiente, dulzura, calma, pájaros, notas y flores. Sólo en mi pecho hay dolores y desencanto en mi alma.
Mayo
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Es Elisa una hermosa cortesana de formas seductoras, de mejillas de grana y de ardientes pupilas brilladoras. Su rubia y luminosa cabellera, cual cascada de oro, cae por su espalda blanca y hechicera; y es su cuerpo de gracias un tesoro. Príncipes y señores le entregan sus riquezas. Por sus...
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BARBIERI Ruiseñor cuyo canto es nuestra patria; sus obras son el español poema; el madrigal dulcísimo que cruzan los amantes nocturnos en la reja; el árabe cantar; el poderoso grito de libertad e independencia; el ritmo cadencioso y elocuente que forman con sus pasos nuestras bellas; la hermosa...
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Cuando me encuentro solo, y los aromas del oriental dorado pebetero con sus olas azules me rodean, jinete en el bridón del pensamiento vuelo al mundo divino y misterioso de las hadas, los gnomos y los genios, a ese gigante mundo del poeta de fantásticos seres gran imperio. ¡Oh! Cómo me deleitan...
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¡Miradlo, es él! En su pupila ardiente del genio el gran relámpago serpea; el noble patriotismo centellea en su pecho valiente, en su severa frente con intenso fulgor brilla la idea. ¡Miradlo, es él! Nuestro inmortal Quintana, el poeta coloso cuyo canto soberbio y generoso es el orgullo de la...
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Hermosa, ya tus pupilas que soles radiantes fueron, perdiendo van sus fulgores, su viveza van perdiendo; tu provocativa boca, trono del amor y el beso, palidece, y huyen de ella la gracia, el clavel y el fuego; ya en la cascada de oro de tus brillantes cabellos, algunos rayos de luna aparecen...