El ruiseñor que pierde sus hijuelos

Cual suele el ruiseñor entre las sombras de las hojas del olmo o de la haya la pérdida llorar de sus hijuelos, a los cuales sin plumas aleando el duro labrador tomó del nido; llora la triste pajarilla entonces la noche entera sin descanso alguno, y desde allí, do está puesta en su ramo, renovando su llanto dolorido, de sus querellas hincha todo el campo.

Collection: 
1510

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VILLANCICO II

Si no os hubiera mirado,
no penara,
pero tampoco os mirara.

Veros harto mal ha sido,
mas no veros peor fuera;
no quedara tan perdido,
pero mucho más perdiera.

¿Qué viera aquél que no os viera?
¿Cuál quedara,
señora, si...

Cual suele el ruiseñor entre las sombras de las hojas del olmo o de la haya la pérdida llorar de sus hijuelos, a los cuales sin plumas aleando el duro labrador tomó del nido; llora la triste pajarilla entonces la noche entera sin descanso alguno, y desde allí, do está puesta en su ramo,...

Tristeza, pues yo soy tuyo,
tú no dejes de ser mía;
mira bien que me destruyo
sólo en ver que el alegría
presume de hacerme suyo.

¡Oh, tristeza!
que apartarme de contigo
es la más alta crueza
que puedes usar conmigo.
No huyas ni seas tal...