Vestido alegremente
Un caballero valiente
Por sombras y lo soleado
De lejos había viajado,
Entonando una canción,
Buscando El Dorado.
Pero se envejeció
Este caballero valiente
Y sobre su corazón cayó
Una sombra porque
La tierra jamás encontró
Pareció a El Dorado.
Y cuando su fuerza
Le abandonaba
Se dio con otra sombra
-Sombra,- dijo
-¿Donde estará
La tierra de El Dorado?
-Ve al otro lado de
Los Montes, de la Luna,
Y por el Valle de la Sombra.
¡Que vayas con valor,-
Contestó la sombra,
-Si buscas a El Dorado!