• ¡Salve, divina emperatriz del cielo,
            Como la gracia pura,
    Mística luz de paz y de consuelo,
            Tesoro de hermosura!

    ¡Salve, limpio fanal resplandeciente
            De donde el sol fecundo
    Toma su luz para lanzarla ardiente
            Al adormido mundo!

    ¡Salve otra vez! ¡mil veces salve, oh fruto
            Del grande pensamiento...