•  ¡Bendito sea! Tan luego ahora
    mostrarse adusta. ¡Quien lo diría:
    ella que siempre conversadora
    llenaba el patio con su alegría!
    Es increíble lo que les cuesta
    hacer que escuche si le hablan de esto;
    ruegan, la apuran, y no contesta
    ni una palabra: ¡les pone un gesto!
    Y en cuanto insiste se...