• Hasta se hinca de rodiyas
    para hacerla consentir,
    si hace empeño en resistir
    de un modo fiero la humiya.

    Y la que al pedido ceda,
    infeliz, la pobresita,
    siempre la marca maldita
    grabada en su frente queda.

    Cuando el hombre se haiga hartao
    la deja por ahí tirada,
    y la pobre atribulada
    para el desprecio ha quedao.

    Y si pa...