• (En su cumpleaños)

    Al breve viaje que llamamos vida,
    buscarle paz y bendición quisimos,
    la fe nos alumbró, la senda vimos,
    y en venturosa audacia
    para juntos seguirla nos unimos.

    Y a los dos, así juntos caminando,
    bajo el astro propicio que nos guía,
    nada cansa ni amarga, nada hastía
    de cuanto en fiel presagio
    el...

  • No rinde al proscrito cobarde tristeza
    al ir peregrino de hogar en hogar,
    pues mira extenderse de Dios la grandeza
    por montes, y valles, y el cielo y el mar.

    Un punto nos quitan, un punto querido,
    que patria llamamos con férvido amor;
    mas, presto encontramos que al punto perdido
    se sigue en lo inmenso la patria de Dios.

    He visto cien montes...

  • Parece nueva luz, nueva mañana
    en un nuevo horizonte despertar
    la fe que se levanta soberana
    los abismos del alma a iluminar.

    En este corazón que aletargado
    nido y sepulcro de ilusiones fue,
    nunca cual hoy, ¡ah! nunca ha penetrado
    con suavidades y esplendor la fe.

    Si un lucero miré, presto una nube
    con negrura mató la inspiración,...

  • En mi memoria estás mansión querida,
    con signos indelebles señalada,
    tú que alargas las horas de una vida
    al rigor de un suplicio destinada.

    Mientras furioso a la venganza aspira
    el déspota en frenético ardimiento,
    dulcemente mi pecho aquí respira
    tu ambiente puro, de cuidado exento.

    Me detienes seguro meditando
    desde el tranquilo y...

  • Descendiente de los Shyris,
    Chaloya, padre de Nina,
    huyendo de Rumiñahui
    subió a lo alto del Pichincha.

    Al mirar columnas de humo
    y entender que Quito ardía,
    alzó sus ojos al cielo
    y postrose de rodillas.

    Chaloya, aunque de alta estirpe,
    no fue tenido en valía,
    porque a la corte enojaba
    su ardiente sed de justicia.

    ...