• Me pides versos y quiero,
    sin pomerme ni quitarme,
    para tu bien demostrarme
    tal como soy, todo entero.
    Pues conjeturo y espero
    que la faz de Dios al ver,
    comenzarás a romper
    el camarín encantado
    donde le tiene guardado
    tu corazón de mujer.

    I

    Yo soy el negro pinar,
    cuyo colosal ramaje,
    cual un colosal cordaje
    ...