• De libertad al mundo eras maestra
    mas aún su ciencia te negaba Marte;
    y esa fraterna lucha te hizo diestra
    de las crudas batallas en el arte.
    De tu pecho al valor y fortaleza,
    por ninguna jamás sobrepujada,
    se iguala de tu brazo la destreza
    para esgrimir la ponderosa espada.
    Ya por civil saber eras Minerva,
    mas hoy en todo a la gran Diosa...