¡Que llegue a tanto ya la maldad mía!
Aun Tú te espantarás, que tanto sabes,
eterno Autor del día,
en cuya voluntad están las llaves
del cielo y de la tierra.
Como que, porque sé por experiencia
de la mucha clemencia
que en tu pecho se encierra,
...

Trabajos dulces, dulces penas mías,
pasadas alegrías
que atormentáis ahora mi memoria,
dulce en un tiempo, sí, mas breve gloria
gozada en años y perdida en días;
tarde y sin fruto derramados llantos,
si sois castigo de los cielos santos,
con vosotros me...

Perdióle a la razón el apetito
el debido respeto,
y es lo peor que piensa que el delito
tan grande, puede a Dios estar secreto,
cuya sabiduría
la oscuridad del corazón del hombre,
desde el cielo mayor, leerá más claro.
Yace esclava del cuerpo la alma...

¿Alégrate, Señor, el Ruido ronco
deste Recibimiento que miramos?
Pues mira que hoy, mi Dios, te dan los Ramos
por darte el Viernes más desnudo el tronco.

Hoy te reciben con los Ramos bellos;
aplauso sospechoso, si se advierte;
pues de aquí a poco, para...

Sabed, vecinas,
Que mujeres y gallinas
Todas ponemos,
Unas cuernos y otras huevos.

Viénense a diferenciar
La gallina y la mujer,
En que ellas saben poner,
Nosotras sólo quitar;
Y en lo que es cacarear
El mismo tono tenemos.
...

Deseado he desde niño,
Y antes si puede ser antes,
Ver un Médico sin guantes
Y un abogado lampiño,
Un Poeta con aliño,
Un Romance sin orillas,
Un Sayón con pantorrillas,
Un Criollo liberal,
Y no lo digo por mal.

Ayer sobre dos...