Salmo X Quevedo

Trabajos dulces, dulces penas mías,
pasadas alegrías
que atormentáis ahora mi memoria,
dulce en un tiempo, sí, mas breve gloria
gozada en años y perdida en días;
tarde y sin fruto derramados llantos,
si sois castigo de los cielos santos,
con vosotros me alegro y me enriquezco,
porque sé de mí mismo que os merezco,
y me consuelo más que me lastimo;
mas, si regalos sois, más os estimo,
mirando que en el suelo,
sin merecerlo, me regala el cielo.
Perdí mi libertad, mi bien con ella:
no dejó en todo el cielo alguna Estrella
que no solicitase,
entre llantos, la voz de mi querella,
¡tanto sentí mirar que me dejase!
Mas ya, ver mi dolor, me he consolado
de haber mi bien perdido,
y en parte de perderle me he holgado,
por interés de haberle conocido.

[PD-icon.svg](/wiki/Archivo:PD-icon.svg) Esta obra se encuentra en [dominio público](//es.wikipedia.org/wiki/es:Dominio_p%C3%BAblico). Esto es aplicable en todo el mundo debido a que su autor falleció hace más de 100 años. La traducción de la obra puede no estar en dominio público.

Collection: 
1600

More from Poet

  • Deseado he desde niño,
    Y antes si puede ser antes,
    Ver un Médico sin guantes
    Y un abogado lampiño,
    Un Poeta con aliño,
    Un Romance sin orillas,
    Un Sayón con pantorrillas,
    Un Criollo liberal,
    Y no lo digo por mal.

    Ayer sobre dos astillas...

  • Sabed, vecinas,
    Que mujeres y gallinas
    Todas ponemos,
    Unas cuernos y otras huevos.

    Viénense a diferenciar
    La gallina y la mujer,
    En que ellas saben poner,
    Nosotras sólo quitar;
    Y en lo que es cacarear
    El mismo tono tenemos.
    Todas...

  • ¿Alégrate, Señor, el Ruido ronco
    deste Recibimiento que miramos?
    Pues mira que hoy, mi Dios, te dan los Ramos
    por darte el Viernes más desnudo el tronco.

    Hoy te reciben con los Ramos bellos;
    aplauso sospechoso, si se advierte;
    pues de aquí a poco, para darte...

  • Perdióle a la razón el apetito
    el debido respeto,
    y es lo peor que piensa que el delito
    tan grande, puede a Dios estar secreto,
    cuya sabiduría
    la oscuridad del corazón del hombre,
    desde el cielo mayor, leerá más claro.
    Yace esclava del cuerpo la alma mía...

  • Trabajos dulces, dulces penas mías,
    pasadas alegrías
    que atormentáis ahora mi memoria,
    dulce en un tiempo, sí, mas breve gloria
    gozada en años y perdida en días;
    tarde y sin fruto derramados llantos,
    si sois castigo de los cielos santos,
    con vosotros me...