• Es una araña enorme que ya no anda;
    una araña incolora, cuyo cuerpo,
    una cabeza y un abdomen, sangra.

    Hoy la he visto de cerca. Y con qué esfuerzo
    hacia todos los flancos
    sus pies innumerables alargaba.
    Y he pensado en sus ojos invisibles,
    los pilotos fatales de la araña.

    Es una araña que temblaba fija
    en un filo de piedra;
    el...

  • Entre las hojas de laurel marchitas
    de la corona vieja
    que en lo alto de mi lecho suspendida
    un triunfo no alcanzado me recuerda,

    una araña ha formado
    su lóbrega vivienda
    con hilos tembladores
    más blandos que la seda,
    donde aguarda las moscas
    haciendo centinela,
    a las moscas incautas
    que allí prisión encuentran
    y que la...