Encima
de la azucena esquinada
que orna la cadavérica almohada;
encima
del soltero dolor empedernido
de yacer como imberbe congregante
mientras los gatos erizan el ruido
y forjan una patria espeluznante;
encima
del apetito nunca satisfecho,
de la cal
que demacró las conciencias livianas,
y del desencanto...
-
-
Me impongo la costosa penitencia
de no mirarte en días y días, porque mis ojos,
cuando por fin te miren, se aneguen en tu esencia
como si naufragasen en un golfo de púrpura,
de melodía y de vehemencia.Pasa el lunes, y el martes, y el miércoles... Yo sufro
tu eclipse ¡oh criatura solar! mas en mi duelo
el afán de mirarte se dilata
como una... -
Delinquiría
de leso corazón
si no anegara con mi idolatría,
en lacrimosa ablución,
la imagen de la párvula sombría.Retrato para quien mi llanto mana
a la una de la mañana,
reflejando en su sal, que va sin brida,
la minúscula frente desmedida...Cejas, andamio
del alcázar del rostro , en las que ondula
mi tragedia mimosa, sin... -
Volando del vértice
del mal y del bien,
es independiente
la saltapared.Y su principado,
la ermita que fue
granero después.Sobre los tableros
de la ruina fiel
la saltapared
juega su ajedrez,
sin tumbar la reina,
sin tumbar al rey...Ave matemática
nivelada es
como una ruleta
que baja y que sube... -
Tarde de lluvia en que se agravan
Al par que una íntima tristeza
Un desdén manso de las cosas
Y una emoción sutil y contrita que reza.Noble delicia desdeñar
Con un desdén que no se mide,
Bajo el equívoco nublado:
Alba que se insinúa, tarde que se despide.Sólo tú no eres desdeñada,
Pálida que al arrimo de la turbia vidriera,
Tejes... -
Mi carne pesa, y se intimida
porque su peso fabuloso
es la cadena estremecida
de los cuerpos universales
que se han unido con mi vida.Ambar, canela harina y nube
que en mi carne al tejer sus mimos,
se eslabonan con el efluvio
que ata los náufragos racimos
sobre las crestas del Diluvio.Mi alma pesa, y se acongoja
porque su... -
Ya la provincia toda
reconcentra a sus sanas hijas de las caducas
avenidas, y Rut y Rebeca proclaman
la novedad campestre de sus nucas.Las pobres desterradas
de Morelia y Toluca, de Durango y San Luis,
aroman la Metrópoli como granos de anís.La parvada maltrecha
de alondras, cae aquí con el esfuerzo
fragante de las gotas de un arbusto... -
Hasta el ángulo en sombra en que, al soñar los leves
sueños de la mañana,
funjo interinamente de árabe sin hurí,
llega la dulce voz de una dulce paisana.
La alondra me despierta
con un tímido ensayo de canción balbuciente
y un titubeo de sol en el ala inexperta.¡Gracias, Padre del día,
oh buen Pastor de estrellas cantando por Banville!
... -
¿Imaginas acaso la amargura
que hay en no convivir
los episodios de tu vida pura?Me está vedado conseguir que el viento
y la llovizna sean comedidos
con tu pelo castaño.
Me está vedado oír en los latidos
de tu paciente corazón (sagrario
de dolor y clemencia)
la fórmula escondida
de mi propia existencia.Me está vedado,...
-
Los circos trashumantes,
de lamido perrillo enciclopédico
y desacreditados elefantes,
me enseñaron la cómica friolera
y las magnas tragedias hilarantes.El aeronauta previo,
colgado de los dedos de los pies,
era un bravo cosmógrafo al revés
que, si subía hasta asomarse al polo
norte, o al polo sur, también tenía
cuestiones personales...