• I
    ¡Sólo tu figura,
    como una centella blanca,
    en mi noche oscura!
    *
    ¡Y en la tersa arena,
    cerca de la mar,
    tu carne rosa y morena,
    súbitamente, Guiomar!
    *
    En el gris del muro,
    cárcel y aposento,
    y en un paisaje futuro
    con sólo tu voz y el viento;
    *
    en el nácar...