• Mi padre duerme. Su semblante augusto
    figura un apacible corazón;
    está ahora tan dulce...
    si hay algo en él de amargo, seré yo.

    Hay soledad en el hogar; se reza
    y no hay noticias de los hijos hoy.
    Mi padre se despierta, ausculta
    la huída a Egipto, el estañante adiós.
    Está ahora tan cerca;
    si hay algo de él de lejos, seré yo.

    ...