• Moriré como el pájaro: cantando,
    penetrado de pluma y entereza,
    sobre la duradera claridad de las cosas.
    Cantando ha de cogerme el hoyo blando,
    tendida el alma, vuelta la cabeza
    hacia las hermosuras más hermosas.

    Una mujer que es una estepa sola
    habitada de aceros y criaturas,
    sube de espuma y atraviesa de ola
    por este municipio de...