Es la tarde gris y triste.
Viste el mar de terciopelo
y el cielo profundo viste
de duelo.
Del abismo se levanta
la queja amarga y sonora.
La onda, cuando el viento canta
llora.
Los violines de la bruma
saludan al sol que muere.
Salmodia la blanca espuma:
miserere.
La armonía el cielo inunda,
y la brisa...