En medio de los frascos, de las telas recamadas
Y de los muebles voluptuosos,
Mármoles, cuadros, ropas perfumadas
Se arrastran en pliegues suntuosos,
En una alcoba tibia donde, como en un invernáculo,
El aire es peligroso y fatal,
Donde los ramilletes moribundos en sus féretros de vidrio
Exhalan su suspiro final,
Un cadáver sin cabeza derrama,...