• (Ofrenda) (Octubre 15/ 1920)

    ¿Recuerda amada mía?
    Era al caer de la tarde...
    y al oído te decía
    mientras la tarde moría:

    Mi corazón de amor arde;

    Y en tu faz vi retratada
    duda... Asombro... Alegrías...
    y una fugitiva mirada,
    me hizo ver Aída, adorada,
    que tú también me querías.

    Mientras la fuente ritmaba...

  • Y fue en Versailles, en la dorada fiesta
    —¡oh eglógica pastora deliciosa!—
    que te ofrendé mi amor en una rosa,
    al arrullo sonoro de la orquesta.

    El alma al sueño de la dicha, presta,
    abrevió su existencia dolorosa
    al pronunciar tus labios la amorosa
    confesión pasional, en la floresta...

    Todo volvióse para mí risueña:
    la luz, el lago, el...