• ¿Por qué, citando con voz mas dolorosa
    en llamarte me empeño,
    mientras la inmensa creación reposa,
    de mis cansados ojos más te alejas,
    hijo de la tranquila Noche umbrosa,
    blando, plácido Sueño?
    ¿Por qué tan sólo a mis dolientes quejas
    negando oído, a los vivientes todos
    en profunda quietud sumidos dejas,
    de tu licor dulcísimo beodos?...

  • Durmiose; y al profundo abismo luego
    le parece que baja despeñado,
    donde castiga inextinguible fuego
    a cuantos mueren en mortal pecado,
    y donde son las penas tan atroces,
    que las mayores penas terrenales
    son ilusiones y parecen goces
    junto a aquellos tormentos inmortales.
    Él, a quien enseñó Filosofía
    que mueren alma y cuerpo juntamente,...