• Honra mis lares, cariñoso amigo,
    y pues la lluvia tan tenaz se muestra,
    ven, de la lumbre al amoroso abrigo,
    a hablar conmigo de la patria nuestra.
    Ven, y recuerde nuestro labio amante
    su siempre puro transparente cielo
    a quien no cubren el azul semblante
    jamás las nubes con opaco velo.
    Y mientras nuestra vida prisionera
    hiela y hastía el...