• Es dulce a quien habita tierra ajena
    nuevas sabe su país nativo,
    que engaña de la ausencia la gran pena;
    mas yo, que ausente de mi patria vivo,
    consuelo ni alegría sentir suelo
    con lo que a todos es grato y festivo.
    Antes me oprime grave desconsuelo;
    llanto vierten los ojos, hechos fuente,
    y me lamento al poderoso cielo.
    Pero ¿cómo...