• Italia y Alemania dilataron sus velas
    de lodo carcomido,
    agruparon, sembraron sus luctuosas telas,
    lanzaron las arañas más negras de su nido.

    Contra España cayeron y España no ha caído.

    España no es un grano,
    ni una ciudad, ni dos, ni tres ciudades.
    España no se abarca con la mano
    que arroja en su terreno puñados de crueldades.

    Al mar no...

  • La voz de bronce no hay quien la estrangule:
    mi voz de bronce no hay quien la corrompa.
    No puede ser ni que el silencio anule
    su soplo ejecutivo de pasión y de trompa.

    Con esta voz templada al fuego vivo,
    amasada en un bronce de pesares,
    salgo a la puerta eterna del olivo,
    y dejo dicho entre los olivares...

    El río Manzanares,
    un traje...

  • Jornaleros que habéis cobrado en plomo
    sufrimientos, trabajos y dineros.
    Cuerpos de sometido y alto lomo:
    jornaleros.

    Españoles que España habéis ganado
    labrándola entre lluvias y entre soles.
    Rabadanes del hambre y el arado:
    españoles.

    Esta España que, nunca satisfecha
    de malograr la flor de la cizaña,
    de una cosecha pasa a otra...

  • Sobre la roja España blanca y roja,
    blanca y fosforescente,
    una historia de polvo se deshoja,
    irrumpe un sol unánime, batiente.

    Es un pleno de abriles,
    una primaveral caballería,
    que inunda de galopes los perfiles
    de España: es el ejército del sol, de la alegría.

    Desaparece la tristeza, el día
    devorador, el marchitado tallo,
    cuando...

  • Dos especies de manos se enfrentan en la vida,
    brotan del corazón, irrumpen por los brazos,
    saltan, y desembocan sobre la luz herida
    a golpes, a zarpazos.

    La mano es la herramienta del alma, su mensaje,
    y el cuerpo tiene en ella su rama combatiente.
    Alzad, moved las manos en un gran oleaje,
    hombres de mi simiente.

    Ante la aurora veo surgir las...

  • Los quince y los dieciocho,
    los dieciocho y los veinte...
    Me voy a cumplir los años
    al fuego que me requiere,
    y si resuena mi hora
    antes de los doce meses,
    los cumpliré bajo tierra.
    Yo trato que de mí queden
    una memoria de sol
    y un sonido de valiente.

    Si cada boca de España,
    de su juventud, pusiese
    estas palabras,...

  • Hombres veo que de hombres
    sólo tienen, sólo gastan
    el parecer y el cigarro,
    el pantalón y la barba.

    En el corazón son liebres,
    gallinas en las entrañas,
    galgos de rápido vientre,
    que en épocas de paz ladran
    y en épocas de cañones
    desaparecen del mapa.

    Estos hombres, estas liebres,
    comisarios de la alarma,
    cuando...

  • Caídos sí, no muertos, ya postrados titanes,
    están los hombres de resuelto pecho
    sobre las más gloriosas sepulturas:
    las eras de las hierbas y los panes,
    el frondoso barbecho,
    las trincheras oscuras.

    Siempre serán famosas
    estas sangres cubiertas de abriles y de mayos,
    que hacen vibrar las dilatadas fosas
    con su vigor que se decide en rayos...

  • Moriré como el pájaro: cantando,
    penetrado de pluma y entereza,
    sobre la duradera claridad de las cosas.
    Cantando ha de cogerme el hoyo blando,
    tendida el alma, vuelta la cabeza
    hacia las hermosuras más hermosas.

    Una mujer que es una estepa sola
    habitada de aceros y criaturas,
    sube de espuma y atraviesa de ola
    por este municipio de...

  • No sé qué sepultada artillería
    dispara desde abajo los claveles,
    ni qué caballería
    cruza tronando y hace que huelan los laureles.

    Sementales corceles,
    toros emocionados,
    como una fundición de bronce y hierro,
    surgen tras una crin de todos lados,
    tras un rendido y pálido cencerro.

    Mayo los animales pone airados:
    la guerra más se aíra...