• Melancolía, saca tu dulce pico ya;
    no cebes tus ayunos en mis trigos de luz.
    Melancolía, basta! Cuál beben tus puñales
    la sangre que extrajera mi sanguijuela azul!

    No acabes el maná de mujer que ha bajado;
    yo quiero que de él nazca mañana alguna cruz,
    mañana que no tenga yo a quién volver los ojos,
    cuando abra su gran O de burla el ataúd.

    Mi...