• Yo vivo encadenado a tu hermosura,
    lo mismo que a su roca, Prometeo,
    sin poder quebrantar la ligadura
    que me une a ti… por más que forcejeo!

    De qué delito bárbaro fui reo,
    para tener que soportar tan dura
    y a la vez dulce pena?, mi deseo
    es un placer que llega a la tortura!

    Me atraes como abismo luminoso:
    Lucho, por arrancarme de tu lado...