• Estando no descuidado
    del rebato venidero,
    mas a guisa de guerrero
    siempre medio salteado,
    oí tocar atabales,
    tamboriles e trompetas;
    a la hora mis secretas
    pasiones muy desiguales
    miedos me ponen mortales.

    Con una grand turbación
    de los sones tanto fieros,
    que los daños venideros,
    temelos el coraçón,
    a grand priesa...

  • ¡Cae agua de revólveres lavados!
    Precisamente,
    es la gracia metálica del agua,
    en la tarde nocturna en Aragón,
    no obstante las construídas yerbas,
    las legumbres ardientes, las plantas industriales.

    Precisamente,
    es la rama serena de la química,
    la rama de explosivos en un pelo,
    la rama de automóviles en frecuencia y adioses.

    Así...